Loveless Shikabane

Cuando te vi me enamoré y tú sonreiste porque lo sabias. Es mejor ser rey de tu silencio que esclavo d etus palabras. Los amigos que tienes y cuya amistad ya has puesta aprueba, enganchalos a tu alma con ganchos de acero. En nuestros locos intentos, renunciamos a lo que somos por lo que queremos ser. El destino es el que baraja las cartas, pero nosotros somos lo que jugamos. El amor es un loco tan leal, que En todo lo que hagáis, sea lo que fuere, no hay mal alguno. Hasta la vida más feliz no se puede medir sin unos momentos de oscuridad, y la palabra feliz perdería todo sentido si no estuviese equilibrada por la tristeza. Lo que niegas te somete, lo que aceptas te transforma. El encuentro de dos personas es como el contacto de dos sustancias químicas: si hay alguna reacción, ambas se transforman. Uno no alcanza la iluminación fantaseando sobre la luz sino haciendo consciente la oscuridad… lo que no se hace consciente se manifiesta en nuestras vidas como destino. Los grandes talentos son los más encantadores y con frecuencia los frutos más peligrosos en el árbol de la humanidad. Cuelgan en las ramas más delgadas y fáciles de quebrar. Yo no soy lo que me sucedió. Yo soy lo que elegí ser.